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Articulos sobre conducta canina

El perro y la vejez: Síndrome Geriátrico

El perro y la vejez: Síndrome Geriátrico

Hace poco una amiga me dijo que los perros son seres de luz que pasan un corto periodo de tiempo aquí en la tierra porque vienen a enseñarnos algo y cuando lo han hecho se van. Estoy plenamente convencida de esto, en este periodo corto que pasan con nosotros cada uno de ellos nos ha enseñado algo, unos se marchan jóvenes otros mas viejos, pero todos nos han aportado cosas sin pedir nada y aunque solo sea por todo lo que nos han aguantado hay que procurarles a los que llegan a abuelos una vejez digna.

la vejez es complicada tanto en humanos como en perros, lleva consigo muchos problemas físicos, cognitivos y emocionales.

Hay perros que no viven mas de 10 años y no tienen tanto deterioro pero hay otros muy longevos en los que si vas viendo el decaimiento de ese perro enérgico que te hacia vibrar. Esto es ley de vida pero también es de ley ser justos con ellos en su ultima etapa.

El síndrome geriátrico: El envejecimiento afecta a todo el organismo, es progresivo y afecta a la conducta del animal.

Al igual que en los humanos la mayoría de los perros viejos sufren de:

Disfunción cognitiva: confusión, desorientación, poca reacción a estímulos, ensuciamiento de la vivienda, irritabilidad, lentitud en obediencia, poca relación con los dueños o excesiva dependencia. Es una especie de demencia senil en los perros, en estos casos suele ayudar un tratamiento farmacológico que mejore el riego cerebral mejorando asi la conducta.

Ensuciamiento de vivienda: muchos pierden el control de esfínteres por que su sistema fisiológico y/o cognitivo ya no funciona bien, o por que comienzan a tener una excesiva dependencia del dueño (típico caso del perro que de joven sufrió ansiedad por separación y en la vejez vuelve a aparecer el problema).

Hay veces que se muestran agresivos cuando se les toca u otros perros se les acercan, hay que ver si el motivo es un dolor de huesos por la artrosis, artritis… o cualquier otra enfermedad que le este provocando dolor y no quieren que nadie les toque.

Le puedes ver mas torpe, esto puede ser por que ya no vea bien, que su riego cerebral sea menor afectando a la coordinación…..

 

Como le podemos ayudar:

Primero teniendo paciencia, comprendiendo que es un abuelo y como nosotros sufre de los achaques de la vejez.

Después debemos estimular su nivel cognitivo con juguetes interactivos, Kong relleno de comida, juegos de búsqueda, enseñarle nuevos trucos (en que  mano esta la comida, dar la pata…)…. estas actividades favorecerán su orientación espacial, coordinación, mejoraran su inteligencia, retrasaran la demencia…

Los paseos deben ser menos intensos, nuestro perro ya no necesita estar una hora seguida en la calle paseando, jugando con otros perros….. (cosas de jóvenes), pero si, debe dar paseos cortos varias veces al día para que sus huesos no se anquilosen, y le vendría perfecto estar contigo en el parque mientras estáis sentados en un banco o tumbados en el césped tomando el sol, viendo la luna  (simplemente pasar ratos juntos).

Darle condroprotectores o medicación (recetada por el veterinario) que ayude a disminuir el dolor de huesos y mejorar la movilidad, ante todo dar la máxima calidad de vida posible.

En el control de esfínteres hay veces que es necesario ayuda farmacológica (veterinaria) para controlar los escapes de pis, y por supuesto salir mas veces a la calle a hacer sus necesidades ya no tienen el aguante de la juventud.

Pierden el oído y la vista:

La vista. Le podemos ayudar no haciendo cambios en el mobiliario de casa, arcos antichoque,  que su manta, su comida, agua,  estén siempre en el mismo sitio, acercándonos a el mientras le hablamos….

El oído. Podemos usar un collar de vibración para llamar su atención  y si todavía conserva la vista ayudarnos de ella.

En el caso de que haya perdido ambos sentidos debemos recordar no acercarnos bruscamente, si no poco a poco, ademas que haya mucho contacto físico con nosotros que nos sienta que estamos con él, masajes, caricias, proporcionarle  estímulos táctiles, estímulos olfativos (trabajo de olfato), gustativos….

Tener horarios fijos de comida y salidas mejorara en su orientación temporal y control de esfínteres.

En definitiva, que en su ultima etapa se sienta comodo, respetado y querido